miércoles, 19 de agosto de 2009

Mensaje


Por fin la noche se torna azulada y perversa, hace algunos meses, más que inspirarme me anunciaba una muerte inesperada.

Hoy quiero dedicarte un canto a la lujuria, quiero hundirme (una vez más) en las comisuras de tu cuerpo, descansar sobre tu pecho, y luego liberar totalmente las palabras que contuve durante la fusión de estrellas y estratos que sostuvimos sobre esa aspera superficie, y recordando la entrevista de tu piel a mis pupilas, cantar la misma canción en el mismo recorrido.

.

No hay comentarios: